En una entrevista íntima en la Cope, y ante la pregunta sobre 'qué pensaría Dios sobre él', Mourinho no ha dudado: "Dios tiene que pensar que soy un tío cojonudo".
Para los mal pensados, antes de que le lluevan insultos al luso, traduzco: Mourinho se siente un tipo con suerte por todo lo que Dios le ha dado: familia fantástica y el trabajo que él quiso.
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