Leire Pajín, la más dedicada y remangada musa del zapaterismo, nos ha dejado una jornada para enmarcar, desde el Foro Ideas+Diálogo, foro de contenido contradictorio con ese arte de la musa zapateril. Y lo ha hecho con tres perlitas que no hacen más que confirmar que para ser Ministro en estos momentos no es necesario ser bien formado, ni prudente, ni capaz, ni medianamente inteligente. Basta afiliarse al PSOE, y decir barrabasadas que rayan el extremo de la sinrazón de lo post-moderno-políticamente correcto, y listo, Ministra de Sanidad, que no es poco. Nada de licenciaturas en medicina o doctorados en física, como en los demás países de nuestro entorno europeo, aquí se empieza pegando pósters en las paredes de las calles y se acaba haciendo catálogos de lo incorrecto, para prohibirlo casi que por decreto. Y si no entienden, vean:
Perla 1: "Pajín critica a Rajoy por no hacerse la cama ni cocinar en casa" (titular de ABC). Ante las preguntas de un grupo de críos, en un programa de Cadena 100, Rajoy fue preguntado sobre su participación en las labores domésticas, obligándolo a admitir que no goza demasiado tiempo para esas cosas. Por eso Pajín dice que "pone en evidencia una de las asignaturas pendientes de España: la conciliación de la vida laboral y familiar en igualdad de condiciones". Que alta conclusión de tan simple afirmación! Me divierte intentar imaginar a Pajín haciéndose la cama y cocinando en casa, porque no consigo hacerlo (por lo menos a Rajoy ya lo he visto cocinar). Pero supongo que este feminismo 21.0 de Pajín tiene en sus estatutos la prohibición expresa de realizar labores domésticas a féminas, pues perpetúan el estado de esclavitud femenina. Ah... es por eso que no la veo! Curioso es que cuando le preguntaron si ZP haría la cama o cocinaba, ella cerró sus característicos y feministas morros.
Perla II: Un espectador de una obra de teatro en Madrid ha denunciado el espectáculo, porque presuntamente (aunque los artistas lo niegan) algunos de los actores fuman tabaco de verdad mientras actúan (exigencias del guión). Leire no quiso dejar de volver a lucirse, y ante la pregunta de sobre si era correcto, ella afirmó: "un escenario es un lugar de trabajo y no se puede fumar". Toma ya. El feminismo 21.0 pajiniano en su variante prohibitiva igualitarista no da un chance al teatro. Para la musa zapateril, actuar, hacer arte, es simplemente como trabajar en una oficina. Pero no se queda aquí, y lo mejora aún más: si en el cine hay asesinatos, y no son de verdad, se deduce que en teatro, si se fuma, no tiene porque ser de verdad. La verdad es que sus recursos de lógica dejan perplejo a cualquiera.
Perla III: Finalmente, la ilustre musa, siendo preguntada sobre las famosas pulseras fraudulentas "Power Balance", ha dicho que "a mí me la regalaron y me gusto". El ABC lo explica así: A la ministra de Sanidad, Leire Pajín, aún le persigue la pulsera «Power Balance», ese trozo de silicona y plástico al que se le atribuían propiedades pseudomilagrosas. Pajín la lució en numerosas ocasiones en su brazo izquierdopero tuvo que desprenderse de ella antes de jurar el cargo porque el ministerio que iba a dirigir consideraba que incurría en publicidad engañosa. Una pregunta directa en el Foro Ideas+Diálogo le volvió a recordar el adorno pseudocientífico que tanto revuelo ocasionó. Y quiso zanjar la polémica: «A mí me la regalaron, me gustó y la usé. Nada más».
Y pensar que la Salud de un país está bajo la responsabilidad de esta mujer ... estará el mundo al revés?
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